Amelia Flores la Alfabetizadora

Cada ocho de septiembre, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) celebra el Día Internacional de la Alfabetización. Con el orgullo de vivir en un país donde saber leer y escribir constituye una conquista de todos, hace medio siglo, una maestra de la provincia cubana de Las Tunas recuerda aquellos días de 1961, cuando se convirtió en alfabetizadora.

“Tenía solo 14 años. Fueron mis tíos y dos vecinas de la familia mis alumnos. Tenía que dar las clases en el horario de la tarde-noche, pues los hombres trabajaban lejos y regresaban pasadas las 5.00.”

Numerosas anécdotas sobre las jornadas vividas para llevar a sus compatriotas la luz del conocimiento podrían ser contadas a lo largo y ancho del país. En el caso particular de Amelia Flores, su testimonio cobra otros matices pues la Campaña de Alfabetización marcó el inicio de una profesión que desempeña hasta nuestros días.

“Llevo 45 años como maestra primaria. Desde 1985 trabajo en la escuela Mártires del 28 de diciembre. Me jubilé en el 2006 y al llamado que hiciera el presidente Raúl Castro Ruz, me reincorporé y seguí trabajando con primer grado. Adoro ese grado, pues veo cómo avanzan mis niños en la medida en que yo le voy transmitiendo los conocimientos, además, es la base para su vida docente futura.”

La ayuda solidaria ofrecida por lo cubanos en disímiles países para enseñar a leer y escribir a los más necesitados, es la continuidad de aquella campaña realizada por Cuba hace 50 años, que permitió el 22 de diciembre de 1961, declarar al país: territorio libre de analfabetismo.