Blogia
Tunastv

Ratifica Cuba voluntad de estrechar aún más los vínculos con la emigración

El ministro cubano de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez, calificó de permanente e irreversible el proceso de normalización de las relaciones de Cuba con su emigración.

En la apertura de la Reunión de Cubanos residentes en el exterior contra el bloqueo y en defensa de la soberanía nacional, que se desarrolla en La Habana, afirmó el Canciller que se mantienen invariables los propósitos de facilitar cada vez más los contactos y la comunicación entre los cubanos que residen en el exterior y su familia y su pueblo en Cuba.

Ante más de 450 delegados de 42 países, Rodríguez explicó que pese los recortes impuestos por la situación económica internacional y otros factores, la Isla ha decidido mantener abierta sus 136 oficinas consulares en el exterior con el propósito de garantizar la continuidad de la asistencia y los servicios a sus coterráneos.

Indicó que hace dos años se registraban acciones contra el bloqueo de parte de cubanos residentes en 42 países y actualmente existen 106 organizaciones en 61 países.

El jefe de la diplomacia de la Isla agradeció la inmediata respuesta solidaria que desde muchas partes del mundo encabezaron los cubanos para enviar ayuda a las zonas más afectadas por los huracanes que impactaron a Cuba en el 2008 y provocaron daños equivalentes al 20% del PIB.

Recordó que en la historia de la Mayor de las Antillas ha estado siempre junto a ella la emigración, la cual fue perseguida por su apoyo a la independencia durante la Guerra de los Diez Años y con la que Martí fundó el Partido Revolucionario Cubano para lanzar la del 95.

"Solo una minoría ha sido anexionista, batistiana, contrarrevolucionaria, terrorista y buchista", precisó Bruno Rodríguez, quien aclaró que hoy la mayoría de la emigración está junto a su patria agredida y bloqueada.

Precisó, además, que los cubanos en el exterior sufren el uso de la política migratoria norteamericana como un arma contra la Isla, para crear pretextos de agresión, desestabilización interna y hacer subversión.

El ministro se refirió a la nociva influencia que ejerce el bloqueo económico comercial y financiero en las relaciones entre lo cubanos de la Isla y los del exterior.

Argumentó que aunque ha disminuido la retórica anticubana, las medidas positivas adoptadas por el gobierno estadounidense son extremadamente limitadas e insuficientes para desmontar las más brutales restricciones que aplicó George Bush a los viajes de los emigrados cubanos y el envío de ayuda a sus familiares.

No obstante, aseguró, Cuba accedió a restablecer las conversaciones migratorias interrumpidas por el gobierno de Bush y dialogar todos los asuntos de interés bilateral sobre las bases de respeto, igualdad soberana y sin menoscabo para nuestra independencia y autodeterminación.

Afirmó que para un eventual proceso de diálogo dirigido a mejorar las relaciones, las autoridades cubanas propusieron a Estados Unidos temas esenciales como el levantamiento del bloqueo, la exclusión de Cuba de la lista de países terroristas, la derogación de la Ley de ajuste cubano y la política de pies secos y pies mojados, que estimula la emigración ilegal, así como la compensación por daños económicos y humanos.

El canciller mencionó también entre los temas esenciales la liberación de Los Cinco antiterroristas encarcelados en EE.UU., la devolución del terreno ocupado por la base naval de Guantánamo, el fin de las agresiones radiales y televisivas desde el país norteño y el cese del financiamiento a la subversión interna.

0 comentarios