Tras la ruta del churroso
Salimos de Zabalo junto a los trabajadores de la Estación Biológica Las Tunitas. Al frente de la expedición la Bióloga Aryamne Serrano, especialista en Areas Protegidas de la Empresa Nacional para la protección de la Flora y la Fauna. Ella dirige el proyecto Conociendo su hábitat dirigido a la preservación de las aves endémicas de Cuba.
Un tractor fue el medio de transporte utilizado para el traslado. El acceso se dificulta por la cantidad de ramas de árboles que se entrecusan a lo largo del trayecto. Un sendero tupido de mangle, palmas y maderas preciosas nos protege del radiante sol que a esa hora de mañana empapa de sudor las camisas y pone ardiente la piel de los visitantes.
Llegamos a nuestro destino. Justo al lado de la casona de madera y techo de guano, una pareja de carpinteros jabados nos da la bienvenida desde el nido hecho en el tronco de una palmera seca. Maikel Rivero, el camarógrafo se deleita con el panorama y comienza a filmar las primeras imágenes. Mientras tanto, Andres Gil, en su condición de jefe del Departamento de consevación de la unidad territorial de flora y fauna comenta sobre esta especie de aves.
"El carpintero churroso (Colaptes fernandinae) es especie endémica de Cuba. Se trata de un ave que alcanza hasta los 35,5 cm. Actualmente vive muy amenazado de extinción. El churroso, que en algunas regiones se conoce como aguas sucias, debe esos nombres a sus hábitos terrestres. Se estima que aquí en Monte Cabaniguán es donde existe la mayor concentración de esta ave, aunque en la Ciénaga de Zapata también se reporta en menor escala su presencia".
Cámara en mano avanzamos por la formación vegetal de sabana con palmas. La brigada de conservación del bosque revisa el area de nidificación. Ellos cuentan con todas las herramientas posibles para realizar el conteo. En este paraíso natural, saltan a la vista otras especies como el catey, parecía que nunca veríamos al Churroso. Casi al medio día se escucha la voz de uno de los acompañantes: "!Aquí, aquí, vengan todos!. Esta crónica continúa. Les prometo mas detalles en el siguiente capítulo.
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